Aristóteles, Política (1253a):

"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."

martes, 27 de marzo de 2007

El clamor


Me detengo ante el semáforo rojo de la Puerta de San Pablo, a pocos metros de la Casa Lis (foto de fredone) y el Archivo de la Guerra Civil, sitos en la calle que hoy se llama "del Expolio" por decisión tranquila, fría y meditada del alcalde Lanzarote. La SER tiene publicidad y sintonizo la COPE, para hacerme una idea rápida de los improperios del día contra los socialistas. Hay una cuña introductoria a la información sobre el juicio de la Casa de Campo: "Juicio del 11-M. Queremos saber la verdad", con música solemne y fúnebre. Pierdo la pista a la información que sigue. Piensen ustedes qué trasluce la cuña en sí. "Sólo" tenemos un alomojó. El grupo radiofónico sustentado por la Conferencia Episcopal Española, mantiene, incluso en su publicidad institucional, un apoyo claro a las teorías conspiranoicas. Porque, no nos engañemos, yo también quiero saber la verdad, pero lo que yo entiendo por la verdad y la que busca la COPE no coinciden mucho. Alomojó yo confío en lo que determinen la policía y los jueces. Alomojó me parece más fiel a la verdad que Suárez Trashorras y su Guerra Civil por encargo.
Es decir, de modo algo indirecto la jerarquía de la Iglesia católica se alinea con las tesis interesadas y retorcidas del nutrido y heterogéneo grupo conspiranoico. No creo que esto venga en las Sagradas Escrituras, pero como la Biblia es tan larga, ¡vaya usted a saber!
La verdad del 11-M es para mí quizá lo más intragable de la estrategia de los medios afines al PP. En este ambiente de inmundicia "la noticia" para algunos es una opinión suelta de un empresario de comunicación. La conspiranoia o el uso partidista del terrorismo no parece que sean llamativos. Quizá porque a fuerza de convivir con todo ello se nos ha encallecido el corazón.
Por si fuera poco clara la alineación indirecta de la jerarquía a través de la COPE con las causas perdidas de lo más sectario e irracional de la derecha, el conspiracionismo, siempre nos queda el cardenal arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, que declaró ayer a Jiménez Losantos que “es un clamor de toda la sociedad que se sepa la verdad, porque el 11-M pesa como una losa sobre la sociedad”, y explicó que “mientras este atentado no se clarifique, y no salga a la luz todo lo que deba salir, vamos a estar dominados por ese peso”.
No quiero interpretar indebidamente a su eminencia, pero, ¿en beneficio de qué partido político surgen las paranoias que está reforzando? ¿qué se le ha perdido a la Iglesia Católica entre el ácido bórico, la metenamina, la Goma 2 ECO y la Kangoo? Dejo al sufrido lector la respuesta.

19 comentarios:

Naveganterojo dijo...

Pero hombre!!! si la iglesia nunca se ha metido en politica.
Que tu eres un rojo muy grande,y aparte de estar excomulgado vas a ir al INFIERNO.
Nuestra "querida" iglesia deberia solucionar los problemas del alma de sus adeptos y dejar en paz a este pais que bastante la ha sufrido durante mas de cuarenta años.

Maripuchi dijo...

Más de 40, dices, Navegante?? Yo diría que la lleva sufriendo por toda la eternidad ....

Y lo que te rondaré ...

Scout Finch dijo...

La iglesia católica sigue metiéndose dónde no le llaman, para desgracia de los católicos y los no católicos. Deberían darse cuenta de una vez de que su actitud no está siendo nada cristiana, porque no lo es andar metiendo cizaña según están las cosas. Me importa un pimiento lo que opinen los obispos sobre el 11-M o sobre si mañana va a llover o va a hacer sol. Que hablen de religión, que es lo que les toca.

¡Saludos!

animalpolítico dijo...

Navegante:
Rojeras sí soy, lo sé. La jerarquía de la Iglesia católica por supuesto que se mete en política, como tu ironía deja ver. Aquí, en Irlanda, en Polonia, en Latinoamérica... No es lo criticable que se metan en política. Lo criticable es si lo hacen sin que sus posicionamientos estén avalados por la doctrina religiosa que se supone les da legitimidad para actuar en la sociedad.
Lo de excomulgado o no no me quita el sueño y en la existencia del infierno no creo, así que no me preocupa.
Yo siento una 'pulsión' interior (como se dice ahora) que me lleva a no hacer el mal a nadie, a tratar de hacer el bien con mi ejemplo y con mis actos y a comportarme con ética y con moralidad. Aunque no vaya a misa los domingos. Sé que eso es lo que debo hacer y eso es lo que trato de hacer. Fíjate si, pese a mis impresiones, existe un infierno, estoy seguro de que no iría a él, por mucho que critique los posicionamientos de Cañizares. Lo que no sé es a dónde iría él. Jiménez Losantos sí sé dónde debería ir.

Scout Finch dijo...

Animal, ¿por qué no es criticable que se metan en política? Esa no es su función, no lo fue nunca, y menos lo es ahora. Lo que tienen que hacer es ser más caritativos y más cristianos, no lanzar opiniones que nadie les ha pedido y que no son de su incumbencia.

animalpolítico dijo...

Maripuchi:
La Iglesia, como todas las instituciones humanas, tiene detrás una historia de claroscuros.
Ha hecho aportaciones a la historia de la humanidad innegables (transmisión de la cultura del mundo antiguo, desarrollo de las artes plásticas y de la música en el entorno de iglesias y monasterios...). La moral y la ética modernas y democráticas tienen una deuda inestimable con el mensaje de Jesús, aunque hoy encontremos desencuentros en algunos temas.
Lo que ocurre es que yo separo el mensaje de amor al prójimo fundamental en Jesús de la interpretación de su misión en la tierra que la jerarquía eclesiástica ha tenido a lo largo de la historia. Los obispos o los papas son seres de carne y hueso. Para decirlo en sus términos, son pecadores. Y han pecado, como los demás, a lo largo de la historia. Un error repetido es su apoyo, su cercanía al poder, poder no siempre justo (o habitualmente injusto) a lo largo de los siglos. El poder terrenal encontró en la Iglesia un arma formidable para mantener subyugada a la población sometida. Errores evidentes de la Iglesia, apoyada en el poder terrenal y éste en ella, son, por ejemplo, la Inquisición, las Guerras Santas o, más recientemente, el contribuir a la Cruzada Nacional Española con argumentos y apoyo moral. Las fotos de los obispos haciendo el saludo fascista o de Franco entrando bajo palio en los templos son terribles.
Con ese pasado detrás es imperdonable lo de la COPE hoy o las palabras de Cañizares que menciono.
Eso sí, a partir del mensaje de Jesús siempre ha habido individuos honestos que han hecho labores sociales, generosas y filantrópicas, desde dentro: curas, misioneros, etc. En siglos en los que ninguna otra institución lo hacía. O en la educación. Ellos educaban en sus valores y educaban a su modo. Pero eran los únicos que educaban antes del desarrollo de un sistema público de educación pleno. Por ello les cuesta a algunos tanto ahora adaptarse a una situación de menor relevancia en lo social o en lo educativo.
Personalmente, no puedo aceptar como bueno un comportamiento que se vea como claramente partidista en temas que no sean de estricta moral cristiana. Lo del 11-M no lo es, evidentemente, como dice Scout.
Del 11-M me interesa lo que digan los policías, abogados, fiscales y jueces. A estas alturas del partido ya sé que de la prensa amarilla no se puede esperar nada sensato.

animalpolítico dijo...

Scout, no me he explicado bien. Yo no digo que no sea criticable que se metan en política. De hecho, yo lo critico, en esta entrada y en otras previas. Lo que digo es que "No es LO criticable que se metan en política". Quiero decir, por ejemplo, que si ellos se meten a decir que están en contra de la extensión del aborto, un tema político, es aceptable que expresen su opinión. Como decía yo, y como dices tú, lo peor es si su crítica no está avalada "por la doctrina religiosa que se supone les da legitimidad para actuar en la sociedad".

Scout Finch dijo...

Ok, perdona, Animal, me tengo que graduar las gafas.

Estoy totalmente de acuerdo contigo. Que opinen sobre temas morales me parece lógico. Pero que dejen de dar la lata con otras cosas.

¡Saludos!

Maripuchi dijo...

Animal, creo que coincidimos en nuestras tesis sobre la Iglesia actual.

El papel de "guardiana de la cultura" que ha desarrollado en siglos oscuros y pasados es cierto. Pero no lo es menos que si esos siglos pasados fueron oscuros fue también por el propio interés de la Iglesia en que lo fueran.

AF dijo...

Animal, la Iglesia católica está metiéndose en estos fregados siguiendo una búsqueda, la del Infierno que Ratzinger ha anunciado como real de nuevo.

Estoy seguro de que el 11 de marzo de 2004 habría podido encontrarlo con facilidad en la estación de Cercanías de Atocha, pero, de haberlo hecho, se habría encontrado con un serio inconveniente a la hora de predicar ante las personas afectadas por el atentado, porque, según él, al infierno van quienes cierran su corazón al amor de Dios. Esto equivale a decir que, si aquello fue el infierno, quienes lo sufrieron habían cerrado su corazón. Es decir, habían pecado. Es decir, aquéllo les ocurrió por su mala conducta.

Ya me habría gustado verle explicando todo eso en aquel momento. Igual habían tenido que elegir otro Papa sobre la marcha...

Contrapunto dijo...

Scout, como personas, creo que los curas y obispos tienen tanto derecho como tú a opinar sobre lo que sea. Según tus palabras, en las que sientas cátedra sobre lo que tienen que hacer, casi se lo ordenas, estás llegando a lo mismo que Azaña en el 36: "Los curas a la sacristía". Yo, creyente, no me atrevo a decirles lo que tienen que hacer, tú, que se ve que no lo eres, te permites el lujo de hacerlo, ¿cual es tu prerrogativa para ello? ¿por qué tienen que callarse la boca? ¿No tienen derecho a expresar opiniones? ¿No era eso la democracia? ¿O era sólo para algunos?
Animal, certifico tu último comentario.
Maripuchi, "Pero no lo es menos que si esos siglos pasados fueron oscuros fue también por el propio interés de la Iglesia en que lo fueran", perdóname, pero según lo leí me decoj...quizá no he entendido bien lo que quieres decir...¿Atila y los hunos, eran monjes cristianos?
Af, no sé si es que no entiendes, o no quieres entender lo que siginifca infierno en el sentido bíblico, o es que tu comentario lleva una carga irónica. Lo siento, a veces es difícil detectar la ironía en comentarios escritos, no acompañados de gestos o entonación especial.
Saludos, Nacho

Scout Finch dijo...

Nacho, ya hemos comentado esto antes. Yo respeto totalmente la labor de la iglesia de base, sin embargo cuando un obispo se dedica a hacer declaraciones sobre el 11-M, yo entiendo que lo hace desde su posición de representante de la iglesia, no desde su posición de persona que puede opinar lo que quiera. Lo que me parece reprobable es que se metan en temas en los que la iglesia, como institución, no debería meterse. Es evidente que como personas cada uno tendrá su opinión y yo la respeto, que por eso, como tú dices, estamos en democracia.

Por ejemplo, en el supuesto de que Zapatero pensase que Rajoy es una mala persona (no digo que lo piense, es un supuesto), como presidente del gobierno no podría hacer esas declaraciones porque es una opinión personal. Como ciudadano puede pensar lo que le dé la gana. Pues lo mismo para los obispos.

animalpolítico dijo...

Lo mismo que Azaña en el 36 y que Jesús según las Sagradas Escrituras, "dad a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César". Los representantes de la jerarquía eclesiástica o los curas en ejercicio tienen un arma, una responsabilidad especial: están legitimados entre sus feligreses como guías espirituales EN MATERIA DE FE CRISTIANA. Por eso es desleal y abusan de su estatus, si opinan en cuanto que tales en temas no estrictamente religiosos, pues son susceptibles de influir en las almas de sus fieles seguidores, que tienen "la guardia bajada" ante lo que diga el cura o el obispo, que son cosas que, por usar una expresión popular muy apropiada, VAN A MISA.
Estoy absolutamente de acuerdo con Scout (y con el espíritu de lo que decía Azaña) en este asunto.
Amigo contrapunto, tú también sientas cátedra y no creo que tengas derecho a decir a Scout que "se ve que no es creyente". Opinar sobre el clero es una cosa y opinar sobre las creencias de uno es otra. Conviene diferenciar. Democracia significa el gobierno del pueblo, que el pueblo, LIBRE, decida. Desde el momento en que ciertas instituciones sociales ABUSEN de su poder de modo ilícito, el pueblo no es MÁS libre, es MENOS libre. Por eso el reparo a que la jerarquía eclesiástica opine de temas de política no estrictamente religiosos. Como tampoco se reconoce a los militares o a los policías la capacidad de expresar en público sus opiniones políticas, porque como ciudadanos con derecho a portar armar, hay una coacción implícita en que se expresen acerca de estos temas. Para ambos cuerpos hacerlo es motivo de sanción. Y también se considera ilícito que un docente abuse de su relación asimétrica con sus alumnos para darles mítines políticos. O un médico, o un abogado, etc. Una cosa es la libertad de expresión y otra el comportamiento profesional leal.
La frase de Maripuchi, en el contexto de Maripuchi donde ella lo matiza debidamente, tiene un fondo de verdad claro: "Pero no lo es menos que si esos siglos pasados fueron oscuros fue también por el propio interés de la Iglesia en que lo fueran". La Inquisición, ¿para qué servía en tu opinión, contrapunto? ¿sabes que llegó hasta bien entrado el siglo XIX? Lo que no te entiendo en absoluto es a qué viene Atila aquí. Lo que Maripuchi dice (corrígeme, Maripuchi, si no atino) es que la Iglesia, aparte de lo bueno que hizo, TAMBIÉN contribuyó a las miserias de la historia, no que fuera la única responsable de las mismas.

Contrapunto dijo...

Scout, ahora ya estoy más de acuerdo contigo (no hay nada como la palabra para explicar las cosas), las visiones son diferentes, pero yo cuando hablan no veo a un obispo, sólo veo a ese señor. Reconozco que la línea entre las palabras pronunciadas como representante de la Iglesia, y las pronunciadas como personas con nombre y apellidos, es demasiado delgada. Como creyente, sinceramente, lo que me interesa es lo que me cuentan de Dios. Para lo demás, son personas de carne y hueso, que se equivocarán, que cometerán delitos, o serán grandísimas personas. Y que como tales, también estarán sometidos a la crítica cuando corresponda. Y esto es lo que yo entiendo por libertad. Soy libre porque puedo escuchar al adversario que también es libre, soy libre porque elijo a quien escucho y lo que escucho.
Saludos, Nacho

Scout Finch dijo...

Pues sí, Nacho. Hablando se entiende la gente.

¡Saludos!

Contrapunto dijo...

Animal, es muy simple, "los tiempos oscuros" en los que la Iglesia fue custodia del saber humanístico y filosófico de la antigüedad, no llegaron al siglo XIX. Se terminaron con la llegada del renacimiento. De ahí lo de Atila, era un ejemplo...burdo si quieres.
La inquisición fue creado en un principio como instrumento de vigilancia. No la voy a justificar, para nada. No se puede justificar nunca la tortura, o la falta de libertad en las creencias. Pero tu muy bien has dicho que se acabó en el siglo XIX.
Y no creo que se abuse del poder de modo ilícito.
Saludos, Nacho

animalpolítico dijo...

Dices: "es muy simple, "los tiempos oscuros" en los que la Iglesia fue custodia del saber humanístico y filosófico de la antigüedad, no llegaron al siglo XIX."

Bien, si por "tiempos oscuros" entiendes la Edad Media, vale. Pero no tiene porqué ser sólo la Edad Media. "Oscuros" puede hacer referencia, y la hace, a una situación global de injusticia social y de atropello político.

"Y no creo que se abuse del poder de modo ilícito."

Bien, depende. Yo creo que en los casos que denunciamos sí. Por las razones expuestas: "Los representantes de la jerarquía eclesiástica o los curas en ejercicio tienen un arma, una responsabilidad especial: están legitimados entre sus feligreses como guías espirituales EN MATERIA DE FE CRISTIANA. Por eso es desleal y abusan de su estatus, si opinan en cuanto que tales en temas no estrictamente religiosos, pues son susceptibles de influir en las almas de sus fieles seguidores, que tienen "la guardia bajada" ante lo que diga el cura o el obispo, que son cosas que, por usar una expresión popular muy apropiada, VAN A MISA."

Contrapunto dijo...

Animal, no es que entienda que por tiempos oscuros solamente la Edad Media, lo que entiendo es que los tiempos oscuros en los que la Iglesia fue "guardiana de la cultura", es decir, donde se dieron históricamente ambos hechos, fue en la Edad Media nada más (recuérdese la famosa novela de Umberto Eco, El nombre de la Rosa). Primero porque la Edad Media fue una época de máxima oscuridad, y segundo porque sobretodo la llegada del renacimiento supuso la verdadera secularización de la cultura.
Respecto a la crítica sobre los casos que denunciais en la jerarquía eclesiastica, entiendo que es tu visión, más o menos compartida, es decir, muy extendida, y no te voy a quitar razón, pero tampoco me atrevo a negarles un derecho, no tengo derecho. Y menos aún a "castigarles" más que a otros que también abusan de posiciones de poder muy parecidas, o incluso aún mayormente influyentes, y me refiero a políticos en general, y a periodistas en general. Mi espíritu crítico me lleva a anunciar mi desacuerdo con quien sea. No se debe tener un criterio diferente, ni se debe edulcorar cuando quien comete el pecado opina como yo.
Saludos, Nacho

animalpolítico dijo...

Vamos a ver, Nacho, es verdad que "la llegada del renacimiento supuso la verdadera secularización de la cultura", pero esto no implica que la Iglesia haya dejado de influir en la cultura, evidentemente.
El problema es que cuando los políticos opinan desempeñan exactamente su función en la sociedad. También los periodistas, siempre que sean capaces de diferenciar información de opinión. Pero los obispos no tienen como función en la sociedad orientar a nadie sobre temas políticos ajenos a la doctrina cristiana. Si lo hacen, abusan de su papel de relevancia social.
Es como si el médico en cuyas manos te pones cuando estás enfermo, y cuya palabra tomas como divina en esos momentos, te "orientara" en temas no médicos.