Aristóteles, Política (1253a):

"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."

viernes, 31 de octubre de 2008

A setas y a Rolex

Interpelado acerca de las revelaciones del libro La Reina muy de cerca, el portavoz del PP, Esteban González Pons ha asegurado hoy mismo que "el Rey y la Reina son como la bandera, a la que vemos cumpliendo su papel en los actos oficiales, pero que no hace declaraciones".

Supongo que González Pons no esparará que por mucho que se ponga un micrófono ante la rojigualda obtenga una declaración de ésta. Si lo que quiere decir es que la familia real debe ser tan neutral como la bandera, podría refrescarle la memoria acerca del uso partidista de la enseña nacional por parte de un partido no precisamente antisistema.

...y me acordé de cómo cuando aquella pareja de vascos salió a coger setas y uno se encontró un Rolex en el suelo y lo cogió tan contento el otro se lo quitó, lo tiró al río y le increpó, "¿estamos buscando setas o Rolex?"...

3 comentarios:

Maripuchi dijo...

Yo estoy encantada con el libro, con la reina y con la cuñada de la reina, es maravilloso... si siguen así, a lo mejor lo consiguen...
Yupiiii

Alberto dijo...

González Pons ha dado la respuesta al por qué de tanta crítica sin darse cuenta: Sofía de Grecia no es una mujer de 70 católica más, sino que es la reina de España, la mujer del Jefe del Estado, de una monarquía parlamentaria hereditaria y sufragada por todos los españoles, una monarquía que se supone debería ser neutral en sus manifestaciones públicas respecto de las leyes aprobadas por el parlamento, representante de la soberanía nacional residente en el pueblo. De ahí que, si alguien que representa una institución neutral se posiciona públicamente sobre las leyes de nuestro país (matrimonio homosexual, aborto o educación religiosa) haya quien se aproveche, indirectamente, de lo que esta señora haya dicho. Tan sencillo como eso.

Anónimo dijo...

Ya veis, yo no me puteo porque abra la boca. Hasta me parece bien, para eso la tiene, y así puede seguir cagandola. Lo que me saca de quicio y me encabrona es que sigan viviendo a mi costa. Y eso me pasa todos los dias, hable o no hable.
Me pregunto que sentimiento republicano les queda a quien nos gobierna. Ninguno y eso me encabrona más.
El Canuit