Rey republicano
Aunque ahora Zapatero sea el coco que quiere destruir España y que pacta con ETA y con el demonio si hace falta, porque es un masón traidor, al comienzo de la legislatura el retrato dominante que se hacía de Zapatero en los medios de la derecha es el de un incompetente sin preparación. De ahí aquello de "pobre hombre" que le espetó Rajoy en el Congreso o lo de "bobo solemne" o lo de "buenismo ridículo". Reflejos de aquello le quedan a Rajoy, como la poco afortunada frase de hace unos días ("para ser presidente deberían exigir algo más que ser español y tener 18 años").
Uno de los "argumentos" que se repetía es que Zapatero afirmó que el rey es "bastante republicano". Como toda cita textual esta cita textual tiene un contexto... con--textual. La verdad es que estoy un poco cansado de un debate político que descansa en verdades a medias y discusiones sobre asuntos absolutamente superficiales. Zapatero estaba conversando con Iñaki Gabilondo en la SER. Éste le preguntó si el PSOE es aún republicano y la contestación me parece prudente: "El PSOE es constitucional", y, como tal, respeta el ordenamiento jurídico de la España de hoy, una monarquía constitucional y democrática, y sigue precisando con la cita en cuestión, que, completa, es así:
"Tenemos un rey bastante republicano. Para mí un republicano es quien es defensor de las instituciones, quien es defensor de los valores democráticos, quien es defensor de la vida pública, quien respeta lo que son los principios de una ciudadanía libre y en ese sentido estamos muy tranquilos".
Esto hay que inscribirlo en la figura retórica del oxímoron. Como decía Jorge Luis Borges, "en la figura que se llama oximoron, se aplica a una palabra un epíteto que parece contradecirla; así los gnósticos hablaron de una luz oscura; los alquimistas, de un sol negro". Como sucede con todas las figuras retóricas la idea que hay detrás es, por definición, utilizar el medio (la lengua) para llamar la atención de un modo especial sobre el contenido. Eso sucede con las metáforas, con las sinécdoques o con los hipérbatos. La relación entre la retórica y el discurso político es tan antigua como Demóstenes, el primer autor en desarrollar científica y seriamente los procedimientos de la retórica antigua y que se sirvió, él mismo, del arte del rétor u orador, en su propia actividad política.
Zapatero se sirve, de modo consciente, de un recurso de la retórica, del arte del político, para llamar la atención sobre un asunto en cierto modo paradójico: el hecho de que el rey Juan Carlos ha mostrado en su actividad política, hasta la saciedad, que comparte los valores democráticos de los políticos idealistas que defendieron en el mundo en su día el surgimiento de una organización política que descansa en la democracia de modo esencial. En ese sentido y en ese contexto, YO TAMBIÉN creo que el rey es bastante republicano. No completamente republicano, dado que eso implicaría que no puede aceptar que una persona por el hecho de haber nacido hijo primogénito de nadie tiene el derecho de ser jefe de un estado. En otras palabras, Juan Carlos podría ser todo lo "republicano" que puede ser alguien que no cuestiona la monarquía. Monarquía constitucional o democrática, es, a propósito, otro oxímoron, otra aparente contradicción en sus términos, dado que Monarquía significa, como sabéis, "gobierno de uno solo".
"Tenemos un rey bastante republicano. Para mí un republicano es quien es defensor de las instituciones, quien es defensor de los valores democráticos, quien es defensor de la vida pública, quien respeta lo que son los principios de una ciudadanía libre y en ese sentido estamos muy tranquilos".
Esto hay que inscribirlo en la figura retórica del oxímoron. Como decía Jorge Luis Borges, "en la figura que se llama oximoron, se aplica a una palabra un epíteto que parece contradecirla; así los gnósticos hablaron de una luz oscura; los alquimistas, de un sol negro". Como sucede con todas las figuras retóricas la idea que hay detrás es, por definición, utilizar el medio (la lengua) para llamar la atención de un modo especial sobre el contenido. Eso sucede con las metáforas, con las sinécdoques o con los hipérbatos. La relación entre la retórica y el discurso político es tan antigua como Demóstenes, el primer autor en desarrollar científica y seriamente los procedimientos de la retórica antigua y que se sirvió, él mismo, del arte del rétor u orador, en su propia actividad política.
Zapatero se sirve, de modo consciente, de un recurso de la retórica, del arte del político, para llamar la atención sobre un asunto en cierto modo paradójico: el hecho de que el rey Juan Carlos ha mostrado en su actividad política, hasta la saciedad, que comparte los valores democráticos de los políticos idealistas que defendieron en el mundo en su día el surgimiento de una organización política que descansa en la democracia de modo esencial. En ese sentido y en ese contexto, YO TAMBIÉN creo que el rey es bastante republicano. No completamente republicano, dado que eso implicaría que no puede aceptar que una persona por el hecho de haber nacido hijo primogénito de nadie tiene el derecho de ser jefe de un estado. En otras palabras, Juan Carlos podría ser todo lo "republicano" que puede ser alguien que no cuestiona la monarquía. Monarquía constitucional o democrática, es, a propósito, otro oxímoron, otra aparente contradicción en sus términos, dado que Monarquía significa, como sabéis, "gobierno de uno solo".
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