Aristóteles, Política (1253a):

"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."

domingo, 8 de julio de 2007

Camarero, tengo un Nietzsche en mi vino...

Friedrich Wilhelm Nietzsche (1844-1900), es un un filólogo clásico y filósofo alemán de enorme influencia en el pensamiento moderno y ello pese a que a los 44 años, sufrió un problema mental grave que lo convirtió en un sombra de lo que fue en los últimos doce años de su vida.

Según Nietzsche, la cultura occidental está viciada desde su origen, pues ha caído de lleno en el peligroso error de intentar instaurar la racionalidad a toda costa.
Pero no sólo es el cristianismo objetivo de sus críticas. A través de la distinción de dos principios fundamentales, lo apolineo y lo dionisiaco, tampoco el pensamiento griego escapa a la navaja Nietzcheana. Los dos dioses griegos, Apolo y Dioniso, serán los puntos de partida. El primero representa, según su análisis, la serenidad, claridad, la medida y el racionalismo, es la imagen clásica de Grecia. Dioniso, sin embargo, es lo impulsivo, lo excesivo, lo desbordante, la afirmación de la vida, el erotismo y la orgía como culminación de este afán de vivir, es decir sí a la vida a pesar de todos sus dolores. Según Nietzsche, la filosofía platónica ha dado un valor desproporcionado a los conceptos, provocando la aparición de un mundo ilusorio y falso que ha ignorado lo vital. La filosofía occidental, encabezada por Platón y Aristóteles reprimió los planteamientos dionisíacos para ofrecer una visión del mundo apolínea...

Recordaba unas palabras de Blanca acerca de mi pequeño autorretrato mientras disfrutaba de un vino macedonio en un estupendo restaurante griego (Thasos) en la Plaza salmantina de San Justo. Y me vino Nietzsche a la cabeza. Se me metió de una zambullida en la especialmente dionisíaca copa de vino afrutado, tinto pero tirando a dulzón...

Blanca hablaba de mi autocontrol. Y puede que ella tenga razón en un sentido. Por razones obvias Grecia ha influido de modo fundamental a nuestra civilización. Y más aún a este animal maragato aún sin domar. ¿Por qué extraño resorte psicológico habré elegido el muy aristotélico animal político, muy apolíneo en sí, y lo habremos transmudado, vosotros y yo, en la versión corta, que suena muy dionisíaca, animal? ¿no recuerda esto a la lucha nietzscheana de las dos vertientes del pensamiento heleno? ¿no son estas dos vertientes, la razón y la pasión, el control y el descontrol, el lado blanco y el lado oscuro, el día y la noche, dos vertientes humanas más que helenas?

Tras un paseo apolíneo por la noche de luz salmantina, con el casco histórico y su dorada piedra de Villamayor encendida contra el negro del cielo, entramos en el pequeño y hermoso restaurante, con la decoración más equilibrada que imaginarse uno pueda. Y disfruté como hacía mucho que no hacía de la dionisíaca pasión del comensal, el sabor más delicado y sofisticado en el paladar, esos aromas, esas mezclas de dulce y salado, esas salsas, esos guisos. El equilibrio que despierta el desequilibrio, regado todo con un rico vino norteño, con nombre y con sabores que nos evocan a las frutas, a la naturaleza, a la vieja deidad de la uva y sus zumos, al viejo Dionisos, también conocido por Baco, que no Paco...

¡Camarero, tengo un Nietzsche en mi vino... y prefiero mi Baco!

20 comentarios:

Maripuchi dijo...

Luego dices que decimos que nos fascina tu prosa ...

Mira que has dado vueltas para llegar a la conclusión de que te gusta el buen comercio y el buen bebercio!!!!

Besos

animalpolítico dijo...

Vaya, me has pillado...

Blanca dijo...

Querido animal... tengo pendiente (y van...) una visita a la Salamanca de mis amores, para pasear contigo el comercio, el bebercio, las plazas recoletas, Unamuno y tanto más...

Para septiembre tengo dos salidas obligadas: una, Salamanca, para estar contigo a tiempo completo, otra a Menesterio, para disfrutar tambien de Antonio Parra.

Sé que la visita a Salamanca, a tu terreno, va a ser más que gratificante... y te demostraré mi conicmiento del medio. Ese medio con tu cátedra sé que va a ser inolvidable.

La de Antoñito, va a ser inolvidable por otros motivos, no menos caros para mi...

La conjunción que estableces con Nietzsche, trufándolo de buen yantar y libar... será una exquisitez, como la que nos ofreces cada vez que haces una nueva entrada.

Un abrazo,

animalpolítico dijo...

Oye, cuando vengas ya me lo harás saber...

Gracchus Babeuf dijo...

El jueves me piro a Naxos, que es la isla natal de Dionisos. Si le veo, le doy recuerdos tuyos.

garib dijo...

Yo no he estado nunca en Salamanca pero me da miedo ir porque cuesta mucho entender a los habitantes de allí y no sé si me van a cobrar sobrepeso por los diccionarios. Además no voy a poder evitar llevarme algún papel.

(tienes que hacer tu lista de blogs que te hacen pensar, animal, que ya te han nombrado la tira)

animalpolítico dijo...

Garib, a un individuo simpático, irónico y sarcástico como voecencia, aparentemente con pseudo-hipocorístico de novelista chileno pero realmente con metáfora de arabismo clásico en su falso antropónimo, a buen seguro le deleitaría la depositaria insospechada del topónimo salmanticense, sede de juveniles escarceos cupídicos, platónicos y no tanto, de millares de sujetos en enseñanza-aprendizaje, muchos en la académica institución más antigua de la vieja piel de toro, la Universitas Studii Salamantini, fundada en 1218 por un monarca castellano y leonés... (no sé por qué dices que no entiendes a los nativos...)

Realmente te gustaría, y ahora hay un vuelo diario entre Barcelona y Salamanca, con Lagun Air. Pronto también Air Nostrum, creo. Yo he estado en Barcelona tres veces en los últimos dos años (la última en marzo) y no he tenido problemas de papeles...

También me daría alguna vueltecilla contigo y podríamos irnos a beber una copilla por la zona del Archivo...

animalpolítico dijo...

Miraré lo de la lista, pero es que me daba rabia tener que destacar a tan pocos...

Saludos

animalpolítico dijo...

Gracchus, qué envidia. Sí, salúdale, por favor. Yo tengo un megaviaje a Grecia en cartera. Quizá en septiembre...

Maripuchi dijo...

A ver ... dejad de dar envidia ya, hombre, por favor!!!

Blanca dijo...

Como yo me voy a Londres dentro de una semana y a jugar unos hoyitos en Saint Andrews (sí, tambien tengo ese lado oscuro) y no podré beber más que pintas de cerveza ya que la uva no es demasiado apreciada por esos lares, me tomaré el vino esta semana con "mis polluelos", para no tener síndrome de abstinencia los siguientes días...

Blanca dijo...

Ah, animal, y como estás de megavacaciones, por el "privilegio" de ser funcionario, disfrutando "a costa" del resto de los españoles... regálanos literatura, no seas vago, que me voy a sentir "más frustrada" de lo habitual...

animalpolítico dijo...

Un nuevo ejemplo, Blanca, de nuestros privilegios: pese a todos los mitos que hay, sólo tengo el mes de agosto de vacaciones, y lo son sólo a medias, pues mis trabajos, publicaciones, preparación del próximo curso, etc., no entienden de calendarios...

Eso sí, no estoy ahora tan agobiado como hace diez años. Te lo aseguro.

No sé si haré literatura o no. Pero me gusta desahogarme aquí. Es un bonito ejercicio. Y como parece que hay quien me lee, miel sobre hojuelas...

Un abrazo y deja algo de cerveza para los demás...

Maripuchi dijo...

Doña Blanca, pongo en su conocimiento que van a traernos ustedes el verano, pues las temperaturas (que no han sobrepasado en lo que llevamos de ¿verano? jajajajajajajajajajaja los 25º EL día que más calor hizo a mediodía) van a ascender hasta los 30º.
No se estilará mucho, pues, el zumo de uva si no algo más refrescante ...
Ruego traigan ustedes ropa de baño y ligera (y alguna prenda de abrigo, no vaya a ser).
Les prometo paseos por los bosques del anillo verde e incluso, si se portan ustedes bien y me traen un cargamento de chupetes del De Madrid, les llevaré a tomarse un refrescante (sin duda) zumo de manzana a Eneperi, donde disfrutarán de una buena comida a la sombra de un plátano y con unas vistas escandalosas.

Afectuosamente,
Su hija

Maripuchi dijo...

¡Ah! Y hagan el favor unos y otros de no ponernos los dientes largos a los que, por motivos diversos, no nos iremos a ningún sitio. :D

Adivagar dijo...

Animal, te felicito por la entrada. ¡Menuda prosa barroca tienes! El buen comer y buen beber estimula las relaciones interpersonales, en este caso entre Animal (político), Nietzsche y Baco...

Yo presumiría de ir dentro de un mes a Australia, pero como es por motivos laborales y solo voy a pisar una vía en mitad del desierto no creo que depierte muchas envidias. Aunque quizá vea canguros en su hábitat natural. Y serpientes, tarántulas... Qué horror, con lo bien que se está en la playita, y allí es invierno.

Un saludo, Animal (político).

Anónimo dijo...

Ahh, Nietzsche el eterno cínico. Pasan los años y cada vez parece que tiene más razones para tener razón. El hombre sigue siendo el lobo por antonomasia de la humanidad, por más que uno se resista a reconocerlo.

Don animal, sigue usted en plena forma.

Un saludo

animalpolítico dijo...

Gracias, Adivagar, por tus palabras. Aunque eso de 'barroca' no sé cómo tomármelo. Es como un amigo mío, el quinto de cinco hermanos, que siempre contaba que la abuela, cuando los veía después de unos meses, siempre 'pasaba revista' y decía, del mayor hasta él, el pequeño: "qué guapo, qué guapo, qué guapo, qué guapo, qué guapo, qué... simpático...".

Lo de Australia suena muy interesante, aunque cansado. Yo no disfruto nada los vuelos largos.

Saludos

animalpolítico dijo...

Fogars...

Bienvenido, me alegro de que estés de vuelta.

Y gracias por el cumplido.

Saludos

Scout Finch dijo...

Leyendo esta entrada me acabo de dar cuenta de que no me acuerdo de nada de la filosofía de COU.

Increíble lo que puede dar de sí un vaso de vino, je je.

Gracias por el resumen, Animal.