Aristóteles, Política (1253a):

"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."

sábado, 13 de diciembre de 2008

Gobernar la nave en la tormenta


La situación macroeconómica de nuestras finanzas es, a fecha de hoy, poco halagüeña. De esta realidad incontestable, la oposición conservadora pretende obtener rédito político. La atención prestada a este asunto es enormemente superior a la que se le prestó en la legislatura anterior, pues entonces la economía iba bien y había que hablar de la rendición a ETA y el ácido bórico.

Zapatero cometió el error inicial de minimizar la importancia de la crisis económica, colocándose así a la defensiva, como reconociendo una culpa.

Pero esto es precisamente lo que quisiera cuestionar. Recojo aquí un gráfico muy elocuente. En él podemos ver la evolución del incremento del PIB en España (línea roja), Andalucía (línea verde) y la zona euro de la Unión Europea (línea azul) desde 1991 hasta 2007. España tiende a estar claramente por encima de Europa en los momentos de bonanza, y a acercarse más a la media europea en los momentos duros. Pero la línea es tremendamente paralela en su evolución y no muestra ninguna diferencia relacionable con quiénes estaban en el gobierno en cada momento. Del 81 al 87 ambas líneas tienen una trayectoria ascendente. Durante ese período, la población activa inició también una senda ascendente. Eso sí, en el peor momento de la crisis (mediados de 1985) se llegó a un volumen de paro de 3 millones de personas, con una tasa del 21% aproximadamente. Durante la segunda mitad de la década de 1980, la economía experimentó un auge desconocido hasta entonces, que permitió recuperar en cinco años la pérdida de empleo ocurrida durante el decenio anterior de crisis. Ese período se inició con la entrada de España en la Comunidad Europea, algo sin duda más significativo que el hecho de que desde 1982 el gobierno estuviera en manos socialistas. Pese al fuerte crecimiento del empleo registrado, debido a las fuertes entradas en la población activa, el número de parados en 1990 seguía siendo de 2,5 millones.

En torno a este año, 1990, Europa, España y Andalucía empiezan al unísono una caída brusca en el crecimiento del PIB, con recesión incluída, en los tres casos, en 1993. A comienzos del 94 el paro en España alcanza las peores cifras: el 24,6%. Del 94 al 96 las tres líneas suben. En el 96 se produce un cambio de gobierno en España. Aznar llegó al poder. En ese año el crecimiento es menor en Europa y en España. No en Andalucía. Del 97 al 2000 las tres líneas suben, siendo siempre la verde la más "alegre", sin duda porque Andalucía debe acercarse al promedio de riqueza europeo y se beneficia de fondos de cohesión, etc. Del 2000 al 2003 las tres líneas sufren una brusca caída de nuevo, con los populares en Madrid ("decretazo"), los socialistas en Andalucía y gobiernos de todos los colores en Europa.

Del 2003 al 2006 las tres líneas suben. La española no muestra ningún signo del cambio de gobierno en 2004. A partir de 2007 las cosas empiezan a ir mal. Europa, España y Andalucía crecen menos que el año anterior. 2008, ya fuera de esta tabla, ha ido peor. Varios países europeos (Alemania, Italia, Reino Unido, la zona euro en su conjunto) ya han caído en recesión. Japón, Canadá y Estados Unidos también. España ha sufrido un proceso paralelo, aunque, como otras veces, tarda más en mostrarlo en la cifra macroeconómica de crecimiento. Aún no ha caído en recesión, pero caerá pronto. De nuevo, al igual que en las crisis anteriores, en todas, el desempleo crece galopante en España, mucho más que en Europa. Tenemos hoy aún, eso sí, una tasa de paro menor a la que había cuando los socialistas llegaron al gobierno en 2004.

Dado que los gobiernos nacionales tienen poca capacidad de maniobra en las aguas turbulentas de los ciclos macroeconómicos internacionales, evalúo al gobierno no por el ciclo económico que le toca pilotar (pues no está al alcance de su poder escapar de la tormenta) sino por las decisiones que tome o deje de tomar para ayudar a quienes más lo necesiten en los momentos difíciles.

El piloto de una nave no es bueno o malo porque haya buen o mal tiempo, sino por su habilidad para llevar el timón en cada circunstancia.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Dicho lo cual, podemos aplicar aquello de que la culpa no es de nadie, es soltera.
Pues eso, moderación salarial, para que sigan socializando las perdidas, mientras consienten paraisos fiscales para privatizar las ganancias.
El Canuit

Dardo dijo...

Pero es que, amigo Animal, lo que se le ha reprochado a este Gobierno es su tardía reacción. El presentar, por ejemplo, unos Presupuestos excesivamente voluntaristas (alejados de una previsible fuerte caída recaudatoria) ajenos a un horizonte claramente recesivo, sino de auténtico desplome. Desde 2006 el INE registraba que la curva del consumo familiar se situaba por debajo del PIB; primer síntoma. También desde este año se observa un paulatino descenso de la afiliación a la S.social en el ramo de la construcción conforme a la propia información estadística ofrecida por el M. de Trabajo y S.Social; segundo síntoma. Asímismo el préstamo hipotecario a las viviendas empieza su descenso imparable desde 2006 (estadística del Banco de España); tercer síntoma. El Gobierno reacciona tarde, niega la crisis, es más, se permite hacer previsiones que son cuestionadas desde del principio por los analistas económicos: hace una previsión de PIB para 2008 del 3.5 que luego rectifica al 3.1, frente a la media de la mayoría de analistas, que preveen en torno a una media de 2.5.

En fin, que indudablemente este Gobierno no ha originado la crisis, pero sin duda parece que le ha cogido con el paso cambiado. Por otra parte está por ver como va a lograr la cuadratura del círculo: incrementar el gasto social o mantenerlo con una bajada en la recaudación.
Saludos.

animalpolítico dijo...

Yo creo que sí hay culpables en que haya crisis, canuit. Lo que no es aceptable es que hay quien, en búsqueda de beneficios electorales atribuya al gobierno de turno responsabilidades que, evidentemente, no están en su mano.

Este gobierno no congela los salarios de sus empleados porque haya crisis. Otros lo hicieron repetidamente. Esta es una diferencia importante. Lo que hagan los empresarios es otra cuestión, no al alcance, tampoco, del poder ejecutivo.

Si te refieres a las ayudas a la Banca, por mucha rabia que nos dé, y nos da, los primeros damnificados en caso de bancarrota (nunca mejor dicho) serían... los ciudadanos, no los banqueros.

animalpolítico dijo...

Dardo, de veras, a este gobierno se le reprocha todo. Hasta que nieve en invierno.

Las mismas personas que ahora reprochan no felicitaban al gobierno hace tres años, cuando la economía iba de cine, teníamos superávit y el paro bajo del 8%. Porque entonces, obviamente, se recalcaba que eso no era por el gobierno, sino por el contexto internacional.

¿Cómo tiene que reaccionar un gobierno ante anuncios de crisis, Dardo? Diciendo "sí,en efecto, vamos de cabeza hacia una crisis gravísima, se va a ir todo el mundo al paro y las empresas van a quebrar", con lo que hundiría las bolsas al día siguiente, o "no, no es para tanto, hay una desaceleración, pero estamos bien preparados ante ello".

En cualquier caso, yo ya he dicho en la entrada que hubo errores en las estrategias comunicativas del gobierno. Quedaron como negadores de lo evidente; esto resta credibilidad.

Cuáles son los presupuestos más adecuados para este momento es materia de opinión. Lo que parece claro, para mí, es que el gobierno debe suplir la capacidad inversora del sector privado, temporalmente renuente o incapacitado, con lo que pueda hacer (obra pública), a la par que mantener las atenciones sociales. Si ello implica déficit, me parece secundario. En otros momentos hemos tenido superávit. El déficit que se genere ya se pagará cuando vuelvan las vacas gordas.

J. G Centeno dijo...

Volverán las oscuras golondrinas.... o puede que no vuelvan, ni las golondrinas, ni las vacas gordas, si es que en algún momento estuvieron, que muchos hemos visto que pasaron de largo y si acaso sirvieron para hacer millonarios a especuladores, constructores y otra fauna directamente relacionada con el ladrillo, bajo la mirada complaciente, todo hay que decirlo, del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero al que, tampoco me ahorro el decirlo, le reprocho muchísimas más cosas que a cualquier gobierno del Pp, que al fín y al cabo son la derecha y sabemos lo que dan de sí. Por otra parte su análisis económico podría resultar irreprochable, y seguramente lo es, si no fuera porque olvida lo más importante la estructura podrida del sistema económico capitalista que, sinceramente, no admite más parches. Acabó fracasando la economía keynesiana o de capitalismo renano o de estado de bienestar que mil nombres tuvo la criatura, y acaba de venirse abajo el ultraliberalismo o neoconservadurismo que otros mil nombres tiene está. El futuro no pasa por refundar el capitalismo sino para ir poniendo las bases del socialismo del siglo XXI.
Salud y República.

animalpolítico dijo...

Siempre que nos encontramos en el momento bajo del ciclo económica se produce augurios agoreros, valga la redundancia, y sensaciones mil de fin de siglo, de fin de los tiempos, del fin del mundo. No sé predecir el futuro, pero juraría que en dos o tres años, cual ave Fénix, la economía capitalista más o menos puesta al día (seguramente "menos") volverá a levantar el vuelo.

La capacidad y el interés de muchos individuos y grupos de poder es muy capaz de seguir ideando los parches necesarios. La ganancia, para los de siempre, es mucha. Si el ladrillo ha de perder protagonismo, ya encontrarán nuevos métodos.