Aristóteles, Política (1253a):

"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."

lunes, 4 de junio de 2007

Mirando en Miranda

MIRANDA DEL CASTAÑAR (Salamanca). Domingo 3 de junio, 18:30 horas. 25º C, primer anuncio de la cercanía del verano, tras semanas de lluvia y de frías noches mesetarias.
Es una pequeña población (653 habitantes), situada al sur de la provincia, a 75 km. de la capital, a 38 de Guijuelo, con una altitud de 649 metros sobre el nivel del mar. Llamativa la altitud, 150 metros menos que la capital, porque a cualquiera que se aproxime al pueblo le parece que éste está muy alto. Se asienta sobre una loma coronada por el castillo y su recinto amurallado, que aún conserva sus cuatro puertas. Hay imponentes ruinas de una gran fortaleza, un castillo construido a principios del Siglo XIV. La población nació tras la repoblación de Alfonso IX en el siglo XIII. En 1973 fue declarada Conjunto Histórico-Artístico. Destaca su trama urbana medieval que conserva un gran número de casas blasonadas junto con las otras edificaciones de arquitectura popular creando un conjunto muy atractivo.
Calles empinadas, sombrías, muy estrechas. Los aleros se tocan prácticamente. La población muy envejecida. Olor a humedad. Arquitectura típicamente serrana. Estamos en plena Sierra de Francia, una comarca montañosa del sur salmantino, que linda al sur con la comarca de las ya cacereñas e ínclitas Batuecas. ¿Cómo no voy a sufrir de abstracción y ensimismamiento si vivo tan cerca de las Batuecas y cruzo con frecuencia la comarca leonesa de Babia?
La Sierra de Francia recibe su nombre por la importante aportación francesa en la repoblación medieval, que llevó aparejada una arquitectura peculiar (con vigas a la vista), o los peculiares apellidos de los serranos (Gascón, Cascón, Bernal,
Galache
...).
Es un medio montañoso con valles de diversos ríos poblados de grandes masas boscosas (castaños, fresnos, robles...), un terreno elevado sobre el borde meridional de la meseta del Duero donde acaba la llanura salmantina, con toda una serie de cumbres entre las que destaca la Peña de Francia con 1723 m. de altitud. La Sierra es atravesada por el recorrido de varios ríos, entre los que destacan el río Francia y el Alagón, ya de la cuenca del Tajo. En la zona tenemos el Parque Natural de Las Batuecas-Sierra de Francia y es "Reserva de la Biosfera" como la colindante Sierra de Béjar, más hacia el este.
El habla local traiciona claramente la cercanía de Extremadura. Oigo retazos de una conversación, sin pretenderlo. Ya sabéis que los hispanos no nos distinguimos precisamente por el uso moderado de nuestro instrumento vocal y somos generosos productores de decibelios...
Hay un grupo de mujeres mayores sentadas a la sombra comentando qué buen tiempo hace hoy. Una matiza que hay una corriente de aire que le está fastidiando los riñones. Al otro lado de la acera un hombre de cintura generosa parece comprobar el buen estado de la reforma que están haciendo en la que supongo su casa. Una mujer sale de otra de las casas y es interpelada...

"Hombre, ¿qué hacías, hiha, estabas dormida?", inquiere una de las señoras.
"No, estaba ahí sentada con la tele...".
"Y ¿qué hay hoy en la tele?", se interesa el hombre, ya se sabe, más proclive al sillón-ball. Y añade, "estará el tenis, ¿no?".
"Sí, estaba mirando el tenis, pero no estaba el Nadal, sólo había unas muheres, así que lo quité; si hubiera sío el Nadal lo habría dehao, pero como no era él, lo quité".

Seguía caminando y no oí más que algún problema de salud de algún conocido común que necesitaba "dos muletinas".

Francamente, no lo hubiera sospechado. Pasión por el tenis en Miranda del Castañar, donde es imposible practicar el deporte: no hay metros suficientes suficientemente llanos, salvo quizá la plaza empedrada... pero ¡eso sí que es superficie dura!

Un mal golpe a la bola y hay que ir a buscarla a Extremadura. Eso sí que es fuerza de los medios, globalización, atracción por los símbolos patrios (el Nadal sí, las muheres desconocidas, vaya rollo), sillón-ball dominguero en cualquier remoto rincón peninsular. Hace pensar.

19 comentarios:

Caminante dijo...

¡Qué guapa Miranda del Castañar! Recorrí la zona -más bien pasé- hace ahora 22 años, los que hará mi hija, poco antes de su nacimiento, recuerdo subir a la Sierra de Béjar, ver Candelario, tan guapo, sus puertas en dos donde se apoyaban las señoras ... esas cosas.
¡qué bolo grande el de la foto, donde se asienta la casa!
Gracias por acercárnoslo. PAQUITA

Maripuchi dijo...

Rara es la mujer deportista que destaca por el deporte, las que lo hacen destacan por guapas .... hay que joderse!!

Estupenda descripción de Miranda del Castañar. Y precioso pueblo (y preciosa zona)...

La última vez que fuí, estaba embarazada de Tomás.

Blanca dijo...

Miranda es uno de los pueblos más hermosos de España. He ido varias veces, cada vez que voy a Salamanca, o cada vez que estoy un poco cerca de la zona, la última vez, en una maravillosa estancia en Béjar.

Es inolvidable, esos túneles, que tanto me recuerdan a las juderías, un paseo por esas cuestas es algo indescriptible.

Paseo obligado junto con La Alberca y Candelario, otra maravilla, con el rumor del agua en todo el pueblo, cayendo por su propio peso en las márgenes de las calles.

Y tan cerca todo ello de Cáceres, con esas Hurdes maravillosas... enfín, me has hecho recordar el último paseo a la zona, no hace ni un año.

Tienes mucha suerte, animal... vivir rodeado de tanta maravilla.

Contrapunto dijo...

La zona que describe animal es una auténtica maravilla, a ver si empiezo yo a ir con los crios, que ya llega el buen tiempo.
De todas formas, yo, acostumbrado a recorrer España, realmente solo media: desde Burgos a Ceuta y de Albacete a Badajoz, toda ella está llena de auténticas joyas por descubrir. Y qué contrastes. Desde el fragor del combate con los nervios a flro de piel de Madrid, hasta el tiempo detenido en pueblos como Olivenza.

animalpolítico dijo...

Loc@: la foto a la que te refieres, tengo que decir, no es de Miranda, es del cercano pueblo de La Alberca. La incluyo para que apreciéis la arquitectura de la comarca. Es la foto que más me gustó.

animalpolítico dijo...

Tienes razón, Maripuchi, pero quizá sería igual si hubiera sido en tiempos de Arantxa Sánchez Vicario. Quizá la seguía tanta gente como a Nadal.

Vaya, todos habéis estado por aquí... ¡y embarazadas! (¿alguna peregrinación que desconozco?)

Saludos

animalpolítico dijo...

Sí, Blanca, lo de los túneles entre las murallas y los restos del castillo es una pasada.

La Alberca, Candelario, las Hurdes. Precioso todo... y anclado en el tiempo y en la desesperanza.

Sin jóvenes esos pueblos morirán.

Saludos

animalpolítico dijo...

Contrapunto, tienes razón, toda la razón. Una serie o un meme bonito es que todos dediquemos algún esfuerzo a describir, a difundir en detalle lugares que nos son gratos.

No conozco Olivenza y lo lamento.

Saludos

Contrapunto dijo...

Desgraciadamente, mis viajes, como sabes, han sido siempre por trabajo, lo cual no te deja demasiado tiempo libre para conocer con detalle los lugares, pero siempre encuentras a tu paso cosas realmente sorprendentes.
En la provincia de Cádiz, entre Algeciras y Xerez de la Frontera, existe una ruta por la costa (por Chiclana y Barbate) y otra por el interior, sin apenas civilización, llamada la ruta del toro. Hoy existe una autovía, pero cuando lo conocí, era una carreterucha serpenteante entre montañas en la que apenas se cruzaban dos coches. Dormía en Algeciras, y tenía la última visita del día en Medina Sidonia (otra auténtica joya, con un enorme sabor árabe), y recuerdo aquel día, lloviendo sin parar durante horas. Cuando me disponía a coger el coche a eso de las 8 de la tarde para volver al hotel, mes de diciembre, noche cerrada y sin parar de llover. Escucho a los lugareños comentar que "...loh cibileh ya tienen cortá la carretera de la cohta..." Uf, que yuyu me entró, aquellos 60 km por la ruta del toro, sólo, lloviendo a mares, y sin superar la velocidad de 50 km hora en ningun momento. El viaje se me hizo eterno. Como dormí aquella noche. Pero fue inolvidable.
Al día siguiente volvía a casa, por la misma ruta, pero ya de día ¡¡¡Qué pasada!!! crei que estaba en Asturias, ¡¡¡qué verdor!!! manadas de toros sueltos por los valles..

Adivagar dijo...

Contrapunto, un poquito más hacia el interior, en la sierra de Cádiz, está el lugar más lluvioso de España, Grazalema. En la zona que recorriste están los parques nacionales del pinsapar y de los alcornocales. Una auténtica maravilla, tan verde como Asturias, en un lugar que todo el mundo identifica como árido. Te lo comento porque soy gaditano y amo como nadie mi tierra (y la añoro desde mi exilio madrileño). Y es cierto, en cada rincon de España hay auténticas maravillas. A mi me encantan los pueblos castellanos con esos imponentes templos románicos. Supongo que por contraste, porque a Andalucía no llegó el románico. ¿Y qué me decís de Sigüenza y la Alcarria? Son pueblos cargados de melancolía.

Contrapunto dijo...

Si Adivagar, conozco ese dato referente a Grazalema. En otra ocasión que tuve tiempo me fui de Cordoba a Algeciras recorriendo toda la sierra de Ronda, así, por capricho, ¡¡¡qué maravilla!!!

Maripuchi dijo...

Mis vacaciones de 2005 se dividieron en un maravilloso viaje de novios por Escandinavia y Riga ... una escapadita a Bretaña y una semanita por España (Asturias, Cantabria y Castilla-León) fantástica ...
Un año prolífico en cuanto a viajes.
Me quedé embarazada nada más casarme, así que a Bretaña ya fuí con bombo...

Caminante dijo...

¡Qué viajeros nos hemos puesto ... qué bien! Tengo pendiente de conocer Cádiz, la única provincia junto con la de Huelva que desconozco al completo, Y después de leer lo de los pinsapares y los alcornocales, con Serranía de Ronda añadida ... no podré dejarlo mucho más. Buen día todos PAQUITA

animalpolítico dijo...

Hermosa aventura nocturna nos cuentas, Contrapunto, y que corrobora nuestro amigo el gaditano Adivagar. Lamentablemente yo tampoco conozco nada de Cádiz. Lo más cerca que he estado (y he estado sólo una vez) ha sido Sevilla y Málaga.

Saludos a ambos

animalpolítico dijo...

Maripuchi:

vaya viajecito de novios, colega. Y buena elección de lugares. Ya os iré contanto otros viajes.

Saludos también a ti, Paquita.

Contrapunto dijo...

Una ciudad, pequeña, pero vaya encanto!!! Tarragona. Preciosidad.

Licantropunk dijo...

Se sorprende usted de que en Miranda haya afición por el tenis (a mi no me gusta y también lo ví: seran mis genes serranos) e incluso les retrata como indómitos indigenas que hablan un dialecto extraño, lo que parece sorprenderle aún más. A mi me sorprende que usted se sorprenda.

animalpolítico dijo...

Amigo mío: no me sorprende que a los serranos les guste el tenis. Yo también soy serrano (de León) y me encanta. Lo juego frecuentemente, además. En cualquier caso, me sorprendió más en mujeres de una cierta edad. No me imagino a mi madre siguiendo un partido de tenis. En la vida.

Lo del dialecto extraño no es así. Hablan distinto que en Salamanca, eso es un hecho, y me llama la atención, nada más. Me recuerda el acento extremeño y lo comento porque esto de los acentos y los dialectos me parece siempre interesante.

No se me había ocurrido pensar que un homenaje a Miranda y a su gente pudiera no gustar a los serranos, pero si es así, lo siento.

Saludos

Caminante dijo...

Las susceptibilidades ... ¡cagoenlá! si es que parece que por mucho que uno quiera ir de llano siempre hay alguien dispuesto a ofenderse.
Pero ... si lo del dialecto quedó estupendo, que mi amiga Pura es de Cáceres, que linda con Miranda, y si quiere saca ese "hablilla" y le queda rechulo.
Bueno, ... a otra cosa mariposa.
Un beso, pa´tós. PAQUITA