Aristóteles, Política (1253a):

"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."

jueves, 10 de enero de 2008

La hora del cambio

No nos está permitido participar en uno de los procesos democráticos que más nos afectará en el futuro. Imaginad que allá por el año 2000, en noviembre, con la rocambolesca confusión con ciertas papeletas en Florida, Al Gore, el candidato con más votos a nivel nacional, hubiera terminado obteniendo la presidencia. No entraré en detalles. Sólo recordaré que Bush fue presidente gracias a algo oscuro que sucedió con las papeletas en un estado en el que su hermano era gobernador. En USA, como aquí, es posible tener más votos populares que tu oponente pero perder. Al Gore obtuvo más votos a nivel nacional que George Bush, pero Florida era clave al final. El candidato con más votos en ese estado se llevaría la presidencia. Nunca sabremos cómo hubiera sido el mundo si el candidato presidencial más votado en 2000 hubiera sido presidente.

Sabemos cómo ha sido con éste. En Septiembre de 2001, pocos meses después, un presidente con poca preparación y un perfil muy escorado, una figura política que iba encaminada a lo interno, se encontró en sus manos con la destrucción de las Torres Gemelas, un acto terrorista que por necesidad tenía que cambiar el mundo. Y lo cambió. Pero lo cambió a través de los ojos y las manos de George Bush, un político sin la preparación necesaria, y profundamente sectario, que se apoyaba en sectores sociales increíblemente conservadores, amplias comunidades mucho más retrógradas e incultas de lo que se cree: podríamos recordar, por ejemplo, a los creacionistas, que luchan porque desaparezca de los libros de texto la teoría de la evolución, como si desapareciendo de los libros de texto desapareciese de la realidad.

The war on terror. La invasión de Afganistán, aún con apoyo mayoritario de la comunidad internacional y de la ONU, parecía algo organizado en defensa propia si se trataba de perseguir y castigar a los responsables de los ataques. Parecía.

Pronto se pudo apreciar que la situación se convertía en una preciosa coartada para dar rienda suelta a las ensoñaciones radicales de unos cuantos iluminados que dirigían el mundo. El terrorismo islamista estaba creciendo ante nuestras narices. Las de todos. Y se tomaron las peores decisiones. O las mejores. Las peores si lo que nos proponíamos como comunidad internacional era terminar con el terrorismo internacional. Las mejores si lo que queríamos era potenciarlo.

Llegó el desastre de Irak. Cerca ya de 700.000 muertos es ya hoy la consecuencia directa. El petróleo ha pasado de 25 dólares el barril a 100. Luego algunos hablan de inflación y de hipotecas. El terrorismo que se decía combatir está más fuerte que nunca y 'ensaya' todos los días en Irak, en Afganistán, en Pakistán, en el Líbano, en Argelia. Ocasionalmente, golpea en Occidente. Y entonces nos ocupa mucho más. Parece que la sangre de las víctimas no es siempre del mismo color ni causa el mismo dolor.

El apoyo de España y del Reino Unido puso a estos países en el escaparate. No puede ser casual, sin duda no lo es, que el 11 de marzo de 2004 (911 días después del 9/11 de 2001) en Madrid y el 7 de julio en Londres se atentara en Occidente. Precisamente en estos países: los tres de las Azores.

Varios años y distintas conspiranoias más tarde, el mundo se enfrenta al cambio de timonel. Las victorias demócratas parlamentarias del año pasado invitan a pensar, junto al bajísimo índice de popularidad de Bush, en un nuevo timonel demócrata. Hace falta una catarsis profunda. Ya sea el joven Kennedy negro, Barack Obama, o la sabia y experta reina blanca, Hillary Clinton, ya sea el hombre negro o la mujer blanca, ha llegado la hora del cambio. Ambos hablan hoy de sacar a las tropas de Irak, algo que no se atrevían a hacer hasta no hace mucho. Espero que sea un símbolo de muchas otras cosas. No tengo enormes esperanzas. Pero estoy confiado en que del agujero presente se saldrá. Hacerlo peor es difícil. Las encuestas y los resultados de los demócratas llaman más la atención a los medios que las de los candidatos republicanos. Sin duda porque calculan que la victoria de decantará en contra de los herederos de Bush. Es lo grandioso de un país tan admirable en tantas cosas. También tiene estas fuerzas en su seno. Tan recientemente como el día 3 Clinton tenía el 41% del respaldo demócrata a nivel nacional y Obama el 24%. Hoy tiene ella el 34% y él el 33%. La pelota está en el tejado. ¿Será la hora del cambio?

15 comentarios:

Anónimo dijo...

A mí me gusta Obama, hay algo en Hillary que no acaba de gustarme: demasiado metida en el sistema.

Pero no creo que gane Obama: ya parecía difícil que una mujer llegara a ser presidenta de EE.UU.(es todo un logro, desde luego), pero que lo sea un negro ya me parece hasta revolucionario.

Un saludito¡

desahogandome dijo...

Identificándome con las conclusiones que extraes, en su mayoría, me ha llamado poderosamente la atención el inicio de tu post:

"No nos está permitido participar en uno de los procesos democráticos que más nos afectará en el futuro."

- Gracias a dios no participamos.

- El sistema tal vez parezca democrático pero el proceso no lo es (tú mismo explicas el porqué, visto lo visto hace 3 años).

Y así va el mundo.
Pena mundo.

un abrazo.

animalpolítico dijo...

Me pasa un poco como a ti, Madeleine, pero creo que es un arma de doble filo. Intuyo que EEUU está más preparado para una presidenta blanquita, la mujer de un expresidente del que se tiene, creo, buen recuerdo, que para un joven negro.

Obama puede ganar la nominación y perder la presidencia...

animalpolítico dijo...

Txantxangorri, para mí la democracia americana tiene serios y graves problemas, como supongo sucede en la mayoría de los casos. En efecto yo me refiero a uno de ellos. Pero, con todo y con eso, creo que el proceso electoral en su conjunto sí lo podemos definir como 'democrático'.

Lo que quiero decir es que la elección del presidente de los USA, en la que no participamos, nos afectará mucho.

Anónimo dijo...

Hace poco hice un test en Facebook sobre los puntos clave del programa electoral usamericano. El que más coincidía conmigo de los dos "grandes" candidatos demócratas era Obama.
Yo, que además, soy una revolucionaria nata, doy mi voto a Obama... imaginad el papelón de Clinton de primera dama ... nononono!!!

Santiago Bergantinhos dijo...

Se supone que seguro va a ganar un demócrata porque están más que hartitos de tanta histeria, así que puestos a elegir... no sé... Lo de Obama podría ser un show al ver las reacciones de los grupos extremistas del sur, pero por otra parte creo que con Hillary también nos vamos a reír un montón.

Diréis que me puede el ansia por el espectáculo, pero al fin y al cabo de eso se trata, ¿no?

ybris dijo...

Con cualquiera de los dos cabe la esperanza de un cierto cambio. El escaso cambio que se puede esperar de una sociedad terriblemente conservadora con su nivel alcanzado y con unas fuerzas socioeconómicas prácticamente intocables.
Desde luego cualquier cosa diferente de lo ya visto con lo visto será bienvenida.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Sólo una matización: el alza del precio del crudo a 100 dólares es consecuencia del crecimiento imparable del consumo y el no crecimiento paralelo de la producción. Y esto último se debe sencillamente a que no hay más pozos disponibles, y que muchos ya dan signos de agotamiento. O sea, una causa estructural.
Con invasión de Irak o sin ella, un mero hecho coyuntural (aunque trágico), íbamos a tener el crudo cada vez más caro igualmente.

Saludos

animalpolítico dijo...

Maripuchi, es verdad. A mí me puede atraer políticamente más Obama. Pero ¿podrá ganar?

Un colega mío, negro de Nueva Orleans, me decía hace unos días que Obama no tiene ninguna posibilidad, en su opinión, porque los negros lo evitarán... ¡Todo lo contrario a lo que los analistas andan publicando! No sé quién tendrá razón, pero él estaba pensando en una actitud tradicionalmente muy dura de la población negra con respecto a los que destacan de entre ellos. Además es negro, pero hijo de un africano, de un keniata, y procede de familia culta y 'rica' (desde el punto de vista del que vive en el guetto del Bronx).

No sé.

En cuanto a Bill Clinton, como otro colega mío decía ayer, "dejó buen sabor de boca, sobre todo al gremio de los becarios...".

animalpolítico dijo...

SuperSanti, ¿tú te imaginas a los del Ku-Klux-Klan celebrando la victoria de Obama...? ¡qué fuerte!

Hillary debería, desde luego, tener cuidado con los becarios.

animalpolítico dijo...

Estoy contigo, Ybris. Cualquiera de los dos me vale si logra la presidencia. Tengo la impresión de que este año hay dos candidatos buenos. Mientras que en 2004 no había ninguno. Kerry fue decepcionante.

animalpolítico dijo...

Lole, tienes razón en matizar. Pero yo no diría que la subida se hubiera dado igual sin guerra de Irak. Yo creo que la tendencia era ésa, pero la rapidez, la revolución de precios, está claramente alimentada por la inestabilidad de toda la zona.

Quizá hoy el crudo estaría en 50 o 60 dólares. Pero no en 100.

En cualquier caso, no lo sé. Pero la guerra de Irak buena para esto no habrá sido. Esto sí lo sé.

Saludos.

rosamari dijo...

No tengo muy definida mi candidatura, pero de lo que no hay ninguna duda es que si tiene importancia en el resto del universo.

Nuno Meursault dijo...

A mi me gusta más Obama, aunque Hillary tampoco estaría mal. Cualquier político demócrata me parecería mejor que lo actual, desde luego. y los republicanos no parecen tener a nadie con gancho, por otra parte (McCain me parece un funcionario segundón), así que la victoria demócrata parece cantada. Pero cuidado: sólo "parece" a priori. En 2004 me llevé una enorme sorpresa cuando el inefable George W. Bush resultó ser el presidente más votado de la democracia estadounidense... No me fio ni un pelo de las encuestas ni de ciertos "indicadores" cuando se trata del pueblo americano. No debemos olvidar que ellos no tienen exactamente el mismo punto de vista que nosotros, europeos, sobre su propio país. Así que, optimismo sí, pero con cautela.

Por otro lado, creo que Hillary tendría más posibilidades finales de llegar a la Casa Blanca. Por varios motivos, y pese a ser mujer (desgraciadamente, esto también cuenta, y no a su favor). Obama promete "cambio", y lleva en su programa puntos que el conservador americano medio puede considerar revolucionarios, trasgresores incluso. No estoy seguro de que, llegada la hora de la verdad, los ciudadanos voten por ese programa, amén de que el gran poder de ciertos lobbys que todos conocemos, y que son los mismos que han llevado y sostenido a Bush en la presidencia, se dedicaría con saña a impedir que Barack Obama pudiese tener la más mínima posibilidad.
En base a todo esto y a pesar de gustarme más Obama, siendo pragmático, apuesto por Hillary, con un perfil más moderado y con una preparación fuera de toda duda, como candidata final a la presidencia de los EE.UU.
Desde luego, aunque no podamos participar, nos importan, y mucho, estas elecciones. Al cabo, se elige al Emperador del Mundo. ¿No es cierto? ¿Cómo no van a importarnos?

Felicidades por el blog, Animal... Y disculpas por la parrafada dominical.

Saludos.

animalpolítico dijo...

Gracias, Nuno, bienvenido. Creo que estoy muy de acuerdo con tu comentario. Lo veo de un modo muy similar.

Saludos