Aristóteles, Política (1253a):

"Según esto es, pues, evidente, que la ciudad-estado es una cosa natural y que el hombre es por naturaleza un animal político o social; [....] Y la razón por la que el hombre es un animal político (zôon politikón) en mayor grado que cualquier abeja o cualquier animal gregario es evidente. La naturaleza, en efecto, según decimos, no hace nada sin un fin determinado; y el hombre es el único entre los animales que posee el don del lenguaje. La simple voz, es verdad, puede indicar pena y placer y, por tanto, la poseen también los demás animales -ya que su naturaleza se ha desarrollado hasta el punto de tener sensaciones de lo que es penoso o agradable y de poder significar esto los unos a los otros-; pero el lenguaje tiene el fin de indicar lo provechoso y lo nocivo y, por consiguiente, también lo justo y lo injusto, ya que es particular propiedad del hombre, que lo distingue de los demás animales, el ser el único que tiene la percepción del bien y del mal, de lo justo y lo injusto y de las demás cualidades morales, y es la comunidad y participación en estas cosas lo que hace una familia y una ciudad-estado."

viernes, 1 de agosto de 2008

Animales apolíticos


Vivimos juntos en una colectividad imperfecta, como hemos hecho desde nuestros tiempos como primates, a lo largo de los milenios, en todos los continentes, con frío y con calor, con hambre y bien abastecidos. Hemos rechazado y humillado o perseguido a los diferentes, con rabia y con violencia. Hemos planteado modos de aceptación del diferente, de integración del meteco. Hemos avanzado y hemos retrocedido.

Seguimos siendo un grupo más o menos grande de animales políticos. Porque sólo somos primates. Primates con gafas y vaqueros, con ipods y cepillos de dientes, con iglesias y zapatillas de deporte. Pero primates. Antes en cuevas y hoy en adosados. Antes a caballo y hoy en Boeings y en cayucos. Ayer silbando de un monte a otro y hoy con móviles y sms.

Pero somos primates. Primates. Animales asociados, animales políticos. Aunque con frecuencia nos llama la selva y perdemos el adjetivo. Y dejamos de ser animales políticos para pasar a ser bestias apolíticas no merecedoras del apelativo "primate".

¿Es importante si la razón es racista o no? Sí. Es importante. Y sí, sin duda es racista, qué diantres. Pero es aún más importante que se trata de una violencia inusitada incluso en el mundo animal. Porque los animales no agreden gratuitamente. No agreden "porque sí". Agreden si te quieren comer o en su defensa. Pero, ¿una patada en la cabeza a una niña inconsciente? ¿y los testigos que animan?

Bestias apolíticas.

3 comentarios:

Black Arrow dijo...

Con racismo o sin racismo la violencia está creciendo a pasos agigantados

¿Van a seguir diciendo que no afecta la violencia vista en el cine,la televisión y los videojuegos?


La violencia familiar que ven los menores de edad todos los días y repiten en los colegios con sus compañeros: el Bullying o en las calles con las pandillas juveniles

Ahora hasta se vanaglorian en exhibir la violencia como si fuera una gracia.

Un Mundo Enfermo

Saludos

Dardo dijo...

2000 años antes de Cristo se compuso en Mesopotamia el poema Enuma Elish que es en palabras del filósofo Jesús Mosterín ("El pensamiento arcaico") una cosmogonía; la narración de una "historia" sobre la creación del Mundo que integra historias anteriores orales que se hunden en el neolítico. Pues bien; resulta curioso que aquí se explique la creación de los hombres a partir de la muerte de un Dios (Qingu) del inframundo (de la inercia y del caos); los hombres son creados (modelados) con la sangre de un demonio. El mito explica algo (todos somos hijos de Caín traslando brutamente esto a lo cristiano); explica que tenemos que hacer un constante esfuerzo por vencer nuestra naturaleza perversa. Hay algo dentro de nosotros que nos espanta. ¿Fue Sapiens quien eliminó a Neardenthal?.

Mamíferos que como los licaones o los lobos cazamos en grupo (cooperamos). Y pareciera que a veces no hemos salido de los estrechos límites de la manada. Pero existe toda una multidiversa tradición política, moral, ética, religiosa que intenta superar todo esto. Sin duda, Animal, avanzamos y retrocedemos. Importaría saber ahora en qué sentido vamos actualmente. No, no; no quiero hacer una crítica fácil. Pero lo de etiquetar esto de xenófobo o racista es en primer lugar una hipótesis que requiere ser despejada por una investigación; de lo queno cabe duda es de la perversidad y brutalidad que hay en ello. Una de la voces de las chicas que jaelan este vomitivo espectáculo dice: "..la va a matar", y otra le responde: "..pues que la mate". Todo esto se hace más denigrante cuando a algo tan brutal y primitivo se le une la ocurrencia de grabarlo para difundir esta "hazaña". Yo creo que esto es lo más grave. Insisto hay antes que nada una banalización de la violencia. Nuestros adolescentes del siglo XXI se crían sin los referentes tradicionales. Es más; éstos referentes de autoridad (parientes y profesores principalmente) tienen poco prestigio. Hoy el "saber" (conceptual, actitudinal, procedimental) no tiene esta fuente de transmisión tradicional. Existen otros canales que con frecuencia proporcionan discursos contrarios, segmentados, asumidos de manera acrítica. La verdad que hay mucho que hacer. Pero mucho.

Te comprendo cuando haces referencia a que lo apolítico (una regresión a nuestro estado de barbarie) tiene mucho que ver con esto. Pero el caso es que también es culpable nuestra actual cultura (en sentido amplio) que desorienta a muchos al ser tan sofisticada. No sé; sólo tenemos que ver la "madurez" que en las sociedades postindustriales alcanzan nuestros adolescentes. No sé; ahora estás de vacaciones en un país (USA) donde de alguna manera estas cosas de aquí se experimentaron antes; una especie de avanzadilla de la pesadilla que nos espera si no somos decididos y resueltos con nuestra cosa pública y democráticamente zanjamos estos erráticos comportamientos.

Es verdad que paradójicamente en un régimen más abierto y plural nos encontramos con no está interiorizado algo tan fundamental como el contenido básico de los derechos fundamentales (derechos humanos). Este divorcio entre valores democráticos constitucionales y su práctica por los ciudadonos es todo un toque de atención de que las cosas no las estamos haciendo bien.

Anónimo dijo...

Mi hermano mayor siempre me dijo: cuidate de las fieras de dos patas que las de cuatro cuando te vean se irán.
Ver el dacálogo del juez Aranjuez y ahi encontrareis algunas de las razones.
Eso si la culpa siempre la tienen los demás nunca nuestros hijos.
Asi nos va.
El Canuit