Más de dos millones y medio

Érase una vez en una pequeña ciudad mesetaria, en pleno territorio comanche, en una fría mañana dominguera. El sol brillaba con su luz cotidiana e iba lentamente calentando el ambiente. A cincuenta metros escasos de La Regenta y de cierta muestra peculiar de epigrafía local ("11-M=zETAp"), salimos al polígono churrigueresco patrimonio de la humanidad.

Habían venido a pie desde el cinturón rojo, habían salido de las huras donde viven, viven, bajo tierra o con las orejas gachas, el corazón encogido y con frecuencia las manos anquilosadas de no votar. Había quienes ponían ayer el pie en el suelo después de experiencias típicas de la izquierda volátil. Otros salían con los codos encallecidos y los ojos hundidos tras largas horas de estudio. Estaba el perfil de la perilla, las gafitas y la americana con coderas y bufanda al cuello del típico profe progre. Las amas de casa, los trabajadores, los abuelos, los hijos.

"Lanzarote, que pague el que te vote".

El ayuntamiento que no quiso rehabilitar a Unamuno ni revocar el nombramiento de alcalde perpetuo al caudillo, el que puso la pancarta con el "venceréis pero no convenceréis" en el ayuntamiento de todos, pero no para conmemorar al viejo rector y su coraje rayano en la temeridad ante Millán Astray sino para hacer demagogia franquistoide ante "la memoria rota" por el Archivo, el ayuntamiento del acoso a la Casa Lys, el ayuntamiento que destruirá la Plaza de los Bandos, el ayuntamiento que limpia con denuedo el medallón de Franco en la plaza cada vez que los progres que ladran su rencor por las esquinas lo decoran, el ayuntamiento que derribó el Gran Hotel, el ayuntamiento de la cuarta mayoría absoluta, el ayuntamiento del que se supo hace unas semanas que había perdonado una deuda de casi quince millones de euros a ciertos constructores amigos del alcalde, el ayuntamiento cuyo alcalde manifiesta que no conoce ningún socialista que no sea corrupto, el ayuntamiento que ha perdido una retahíla de procesos judiciales absurdos por confundir la administración de justicia con un sistema de megafonía de sus bravatas (incurriendo en varios millones de euros en costas para las arcas municipales), se encuentra en bancarrota técnica, pues gestionar es mucho más aburrido que desear a zETAp que se reúna en el hoyo con su abuelo.

El verborreico Rodríguez, portavoz acorde al equipo que representa, explica que si el alcalde decide subir el 85% el precio del bonobús (y porcentajes también desorbitados de todos los impuestos municipales), es justo porque muchos salmantinos no usan el transporte público y no tienen por qué pagarlo vía impuestos. Casualmente los barrios que más le votan son los que menos usan el autobús. Yo vivo a las afueras y estoy pensando en dejar de pagar los arreglos de las calles del centro, los caprichos judiciales del alcalde, los regalos a los amigos, las campañas contra mi presidente con el dinero salmantino, las pancartas y manifas de vómitos y amenazas de muerte a Carod y Zapatero. Porque si no yo no uso de todo esto, ¿por qué lo voy a pagar?

La policía municipal estima la afluencia de manifestantes en 14.000. Los organizadores en 45.000. Número éste, por cierto, suficiente para obtener la alcaldía por mayoría absoluta en esta ciudad.

Pero yo he hecho el cálculo aguirriano: la hipotenusa al cuadrado multiplicada por el área occiso-incisa del polígono multipórtico dividida por el número de losas de granito y multiplicada por el cabreo cósmico de los catetos ladrando su rencor me da como resultado, más allá de toda duda razonable, la nada despreciable cifra de 2.543.768. Sáctamente, que diría mi siempre admirado Forges.

ACTUALIZACIÓN A LAS 16:41. Mientras se debate a nivel nacional la bajada de impuestos anunciada por Rajoy en el caso de ganar en marzo, Rodríguez, el portavoz del ayuntamiento de Salamanca, ya ha dictaminado quién tiene la culpa de la subida de impuestos aquí. ¿Lo adivináis? Claro. Eso es. Otro Rodríguez. Rodríguez Zapatero. La culpa es de ZP, que castiga a esta ciudad por su desafección, y no nos da ni un duro. Pablos, el portavoz del PSOE, ha señalado que la transferencia de fondos desde el estado de central ha subido un 15% este año. Pero eso son niñerías. ¡zETAp es enemigo de Salamanca y destruye el Archivo...!